El espacio del baño en un proyecto: Estética mimetizada con funcionalidad

La funcionalidad de los elementos que conforman un espacio es imprescindible en cualquier zona o elemento de una vivienda. El diseño y disposición de un área debe facilitar y crear una sinergia, estética-funcional, con una rutina diaria. Desde Minimal Studio creemos que el minimalismo debe abanderar el utilitarismo del día a día para fusionarse con la vida de los huéspedes en nuestros proyectos residenciales.

 

Comodidad y aprovechamiento

Uno de los emplazamientos que requieren una extrema funcionalidad, por las dimensiones que suele presentar en una vivienda, es la zona de baño. El reto de diseñar y disponer esta estancia reside en una óptima distribución del espacio para que se adapte a las necesidades diarias de aseo, cuidado e higiene diarios, además de prolongar la línea estética del resto de vivienda.

La comodidad es uno de los ejes primordiales en los que debe girar el proyecto de un cuarto húmedo. El aprovechamiento del espacio es prioritario. Colocar la variedad de elementos que lo conforman, de manera que cada cometido tenga sentido, es la clave para el éxito de este espacio.

 

 

La zona del baño no tiene porqué significar una ruptura con la estética ni con el diseño de un proyecto, ya sea comercial o de una vivienda. A menudo puede suponer una culminación donde prima lo práctico y la destacable pureza, resultando en su uso diario el minimalismo como vencedor.

 

 

El secreto de un baño funcional

El uso de materiales nobles en este emplazamiento garantiza la pulcritud que reclama su uso. La selección y proyección de sus componentes se realiza en base a su facilidad de cuidado, limpieza y empaque.

En los proyectos residenciales, así como también en los comerciales, el problema no surge del tamaño que se dispone para habilitar un baño. El secreto está en presentar un espacio que aproveche cada milímetro de su capacidad y seleccionar las piezas adecuadas.